I. Ofrendas florales en las honras fúnebres Los primeros registros arqueológicos que evidencian el uso de flores en rituales funerarios se remontan a hace aproximadamente 13.700 años , en tumbas encontradas en el actual Israel . En estos enterramientos, los investigadores hallaron restos de plantas utilizadas para revestir y decorar las tumbas, lo que sugiere una intención simbólica y ritual en el uso de flores para despedir a los fallecidos. Otro hallazgo clave proviene de la famosa excavación de la cueva Shanidar en el norte de Irak en 1951. Allí se descubrieron restos de polen y fragmentos de al menos ocho especies de flores silvestres en tumbas neandertales , lo que indica que ya en tiempos prehistóricos se realizaban ofrendas florales como expresión de duelo y memoria. Estas evidencias sitúan el uso de flores como parte del culto a los muertos entre las formas más antiguas de actividad ritual documentada por la humanidad. El culto a los difuntos posee profundas raíces también ...
En una estela funeraria griega del siglo IV a.n.e., Phylonoe , una madre joven, contempla con melancolía a su hijo pequeño, ahora en brazos de otra mujer. El niño, con los brazos extendidos hacia ella, intenta alcanzarla en un gesto de anhelo desesperado, encarnando la desgarradora fractura entre el mundo de los vivos y el reino de los muertos. I. La ausencia de dogmas en el tratamiento del cuerpo sin vida La singularidad del mundo helénico en materia funeraria se manifestaba en su resistencia a establecer normativas universales. Herodoto , en sus "Historias" , señala con asombro cómo "cada pueblo considera sus propias costumbres como las más nobles", reflejando esta pluralidad aceptada. Esta flexibilidad contrastaba radicalmente con civilizaciones contemporáneas como la egipcia, donde el ritual de momificación estaba codificado sacerdotalmente, o la persa, donde la exposición de cuerpos siguiendo tradiciones zoroástricas respondía a mandatos religiosos estrictos. L...